Las instalaciones urbanas son parte esencial de mi trabajo, es lo que cierra el ciclo y da sentido a mi producción. Creo en el poder transformador del arte.

Busco mi propia transformación, pero también la transformación y el cambio de las personas, de la sociedad, de la cultura, de la humanidad. Un mundo en armonía es posible. Para que eso suceda, hay que visibilizar el arte, sacarlo a la calle, a los barrios y plazas, a las zonas públicas de las ciudades y de los pueblos, hacerlo visible allí donde transcurre la vida cotidiana.

Por eso creo grandes murales con reproducciones de mis obras originales.

Estos murales se pegan en fachadas, vallas y muros con la colaboración de asociaciones y colectivos de mujeres locales, y se colocan en espacios muy visibles.

Cada papel de acuarela que compone la pieza original es reproducido fotográficamente antes de ser cosido al lienzo, lo que me permite tener una copia exacta en alta resolución de todas las partes que componen la pieza original.

Estas reproducciones digitales están redimensionadas para que cada una de ellas tenga un tamaño de 60x84 cm y están impresas en papel Blue Back.

Una vez elegida la ubicación (muro, valla, cristal, etc.) pegamos con un grupo de mujeres de asociaciones locales, siguiendo mis indicaciones, cada una de las láminas de gran formato que componen el collage.

Así es como creamos colectivamente un 'Colonizado' igual al original pero con dimensiones mucho más grandes (2x2 metros).

Estos murales “colonizados” generan, por un lado, un gran impacto in situ en las mujeres que han participado activamente en la creación de la instalación (sinergias, compañerismo, trabajo en equipo con un objetivo compartido, etc.). Por otro lado, provoca un gran impacto visual en los transeúntes, generando a la vez reflexión y debate.

En cuanto a su contenido, ¿qué significa, qué nos dice esta pieza? Estas acciones se dan en festivales, encuentros artísticos y actos similares.

Si estás interesado en ellos o necesitas más información puedes contactar conmigo.